El 1 de mayo de 2021, el presidente Nayib Bukele, con la sombrilla de su partido Nuevas Ideas, tomó el control de la Asamblea Legislativa, gracias a los resultados de las elecciones legislativas de febrero; pero también tomó de golpe la Corte Suprema de Justicia mediante la destitución de los magistrados de la sala más importante del máximo tribunal: la Sala de lo Constitucional.
El presidente de El Salvador ahora controla el poder Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial. Tres abogados constitucionalistas nos ayudan a entender por qué es, o debería ser, importante la separación de poderes
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