El cambio de la fórmula electoral, a pocos meses de las elecciones, le permitió al partido de Nayib Bukele tener sobrerrepresentación en la Asamblea Legislativa. Según un analista y un dirigente partidario, la reforma afectó a los partidos más pequeños. El partido oficialista también manipuló el escrutinio final de las legislativas.
Foto Factum/ Gerson Nájera
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El partido oficialista Nuevas Ideas logró supermayoría en la Asamblea Legislativa, con 54 diputados electos, según los resultados ratificados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) el pasado 19 de febrero, dos semanas después de celebradas las elecciones presidenciales y legislativas. Esto fue posible después de que, ocho meses antes de las elecciones, Nayib Bukele, presidente reelecto inconstitucionalmente, promoviera una reforma de la fórmula para asignar los escaños, lo cual le permitió a su partido obtener nueve diputados más de los que hubiera ganado si se hubiera utilizado la anterior, la de cocientes y residuos.
La madrugada del 7 de junio de 2023, con dispensa de trámite y con apenas una discusión de cinco horas, la Asamblea, que ya entonces era controlada por Nuevas Ideas, aprobó una iniciativa del Ejecutivo para modificar la fórmula para elegir diputados y redujo la cantidad de 84 a 60. Constitucionalistas y expertos electorales advirtieron que esto buscaba favorecer la concentración del poder, lo cual es contrario a lo que dice la Constitución de la República.
El investigador en Educación Matemática del Instituto de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Universidad Francisco Gavidia (UFG), Jeser Candray, señala que utilizar la fórmula D’Hondt, la que adoptó la Asamblea de Bukele, le permitió al partido oficial obtener nueve diputados más, y además consiguió afectar a los partidos pequeños: con la fórmula y la cantidad de diputados anterior, Nuevas Ideas hubiera obtenido 61 de 84 diputados para aprobar sus iniciativas; Arena habría obtenido seis diputados; el FMLN, seis; Vamos, 3; Nuestro Tiempo, 1; PCN, 2; PDC, 2 y Gana, 3.
“Parece ser que el objetivo fue reducir los espacios de las demás expresiones, porque en los demás escenarios que no son de base 60 (diputados) y del método D’Hondt, la oposición tiene un nivel mayor de participación que no arriesga las votaciones del partido oficial (…) La reforma parece ser hecha para consolidar el discurso del ‘partido único en democracia’ que dijo en el Palacio Nacional el señor Bukele”, analiza el investigador.
Dos partidos aliados del oficialismo lograron diputados con la nueva fórmula: dos del PCN y uno del PDC. Gana, el partido con el que Bukele ganó la presidencia en 2019 y que le dio sus votos a todas las propuestas de la bancada cian, no logró ningún escaño. Guillermo Gallegos, el rostro más añejo de este partido, quien había permanecido en el puesto durante 24 años, por primera vez perdió el escaño legislativo.
El partido de oposición Arena solamente obtuvo dos diputados: Marcela Villatoro y Francisco Lira; Vamos obtuvo una diputada, Claudia Ortiz; y el FMLN, que fue el principal partido de izquierda, quedó fuera de la Asamblea Legislativa, por primera vez desde 1994.
Nuestro Tiempo, que en la legislatura saliente tenía un diputado, incumple los requisitos para seguir siendo considerado legalmente como un partido, porque no obtuvo ningún diputado o 50 mil votos en el territorio nacional, según el artículo 47 de la Ley de Partidos Políticos. Tampoco lograron una curul los partidos alineados al oficialismo Cambio Democrático y Fuerza Solidaria.
El presidente de Nuestro Tiempo, Andy Failer, dijo a esta revista que las reformas electorales que disminuyeron diputados y modificaron la fórmula para asignar escaños complicaron sus elecciones internas, lo cual no les permitió participar en todos los departamentos para obtener más votos. Añadió que las candidaturas a alcaldes están debidamente inscritas y que el Organismo Colegiado del TSE no ha iniciado un proceso de cancelación, por tanto, de obtener alcaldes o concejales asumirán de forma independiente.
“Por un factor bien humano, el cambio de la fórmula electoral nos planteaba un escenario muy cuesta arriba en el que solo el partido oficialista se iba a ver beneficiado, ante eso mucha militancia se abstuvo de participar para la Asamblea Legislativa”, explicó Failer.
Nuevas Ideas obtuvo 2 millones 200 mil 304.75 votos en las elecciones legislativas, lo cual representó un 70.54 % del total. Esta cifra , sin embargo, es inferior a la cantidad de votos que Bukele obtuvo para conseguir la reelección inconstitucional. Arena tuvo 227 mil 357.29 votos en las legislativas, es decir, 7.29 %; y el FMLN, 195 mil 919.98 votos.
Escrutinio legislativo de los departamentos de Chalatenango, La Unión y Ahuachapán. Foto FACTUM/Gerson Nájera
En estas elecciones se implementó por primera vez el voto electrónico de salvadoreños en el exterior. Hubo 240,339 votos, de los cuales 206,750 fueron para Nuevas Ideas, de forma remota. Los votos electrónicos vía remota solo contaron para los diputados del departamento de San Salvador. Para Candray, el investigador de la UFG, esta decisión también influyó para reducir las posibilidades de los partidos de oposición de obtener un escaño.
“Surge la reflexión si es justo o no este sistema de repartición de escaños. El FMLN obtuvo casi 200 mil votos y Gana casi 100 mil. Son alrededor de 300 mil votos de ciudadanos que no estarán representados en la Asamblea”, expresó el investigador.
Las elecciones del pasado 4 de febrero estuvieron plagadas de irregularidades. El escrutinio preliminar fue un fracaso. El día de los comicios, las Juntas Receptoras de Votos (JRV) denunciaron que el sistema de transmisión duplicó los votos. Revista Factum encontró incongruencias en las actas que fueron elaboradas a manos por miembros de las mesas.
El gerente de operaciones de la Asamblea Legislativa, Franklin Nolasco (primero a la izq.); el empleado de Ernesto Castro, Gabriel García (al centro), estuvieron dando órdenes y controlando el escrutinio final de las elecciones legislativas. Foto Factum/Gerson Nájera
El escrutinio final, realizado una semana después, también tuvo varias irregularidades: Nuevas Ideas tomó el control, llevó al Gimnasio Nacional gente no acreditada, impidió la vigilancia de la Organización de Estados Americanos (OEA) y obstaculizó el trabajo de la prensa. Esta revista grabó a un simpatizante de Nuevas Ideas que manipuló los datos del sistema durante el escrutinio, entre otras anomalías.
El jefe de la Unidad de Servicios Informáticos (USI), Ignacio Villagrán, fue uno de los protagonistas tanto en el escrutinio preliminar como en el definitivo. Según una investigación de Focos, Villagrán trabajó en la Casa Presidencial de Bukele, junto a otros dos desarrolladores encargados de la creación de los sistemas que el TSE usó para el conteo de votos.
Revista Factum preguntó el pasado 19 de febrero a los magistrados del TSE Guillermo Wellman y a Rubén Meléndez cómo van a garantizar la independencia de las próximas elecciones municipales y parlamentarias, después de haber contratado como jefe del sistema informático a un exempleado de la Presidencia; cuáles han sido los cambios realizados para garantizar que el sistema no vuelva a fallar, por qué la prensa no tuvo acceso a las mesas de escrutinio, entre otros cuestionamientos, pero guardaron silencio.
#Elecciones2024sv | 🔴 La periodista de Factum, @KarenMorenoPala, realizó diversas preguntas a magistrados del @TSEElSalvador sobre las pasadas elecciones. Una de ellas fue sobre cómo van a garantizar la independencia del TSE. ➡️Los magistrados ignoraron los cuestionamientos. pic.twitter.com/vQpxM4q7RI
— Factum (@RevistaFactum) February 20, 2024
La presidenta del TSE, Dora Esmeralda Martínez, dijo durante una entrevista en Diálogo 21 este 20 de febrero, en relación al jefe de la USI, que “sacan información aduciendo que es la fuente interna, pero no veo pruebas, creo que el periodismo es eso, investigar pruebas documentales, entrevistas no solo de una fuente interna, que ojo con eso, esa fuente interna del Tribunal tiene su corazón más político que los militantes de alguna fracción”, sin desmentir que Villagrán trabajó en Casa Presidencial.
El TSE ratificó los resultados de las elecciones legislativas el 19 de febrero en una cadena nacional pregrabada por la tarde y transmitida a las 8:00 de la noche, sin brindar espacio para la prensa para hacer preguntas y sin detalles para esclarecer estas dudas.
Horas antes de que el Tribunal oficializara los resultados, Nuestro Tiempo, Vamos y Arena presentaron un recurso de nulidad de las elecciones legislativas. El FMLN también pidió la nulidad, pero separado del resto de partidos de oposición.
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