El Ministerio de Educación acumuló en febrero pasado una millonaria deuda con los principales proveedores del programa de alimentación de los centros educativos, lo cual ocasionó problemas, según un informe del Ministerio de Educación (MINED) al que accedió Revista Factum. Entre los proveedores aparece NBS, investigada por la Fiscalía por vender canastas alimenticias a sobreprecio. La falta de aprobación de un proyecto por parte de una funcionaria de confianza de Bukele también impidió que los estudiantes tuvieran suficientes alimentos.
Foto Factum/Natalia Alberto
Una deuda de $11 millones con proveedores, escasez de alimentos, altos costo y la falta de aprobación de proyectos por parte de una funcionaria ocasionaron que estudiantes de las escuelas públicas del país recibieran insuficientes alimentos en sus platos, según un informe del Ministerio de Educación (MINED) al que Revista Factum tuvo acceso.
El informe sobre la “situación del programa de alimentación y salud escolar, año 2023” detalla que la deuda con los proveedores hasta febrero pasado ascendió a $10,941,326.01, que correspondía a ocho proveedores con facturas pendientes de pago desde el 30 de junio de 2022, “lo cual limitó la participación de algunos de ellos en el programa”.
El impago causó desinterés de los proveedores de seguirle vendiendo al Estado, según el mismo documento.
Esta revista también conversó con tres proveedores: dos de ellos confirmaron que el ministerio se retrasó en los pagos por alimentos. Agregaron que esta es la primera vez en varios años que la institución tuvo atraso para pagar.
Entre los contratistas está la empresa salvadoreña más beneficiada con la venta de canastas de alimentos al gobierno de Nayib Bukele: Negocios y Servicios Bursátiles (NBS), del accionista Munir Miguel Bendeck Miguel. Según una publicación de El Faro, la Fiscalía General de la República (FGR) documentó que personal del Ministerio de Agricultura y Ganadería (Mag) seleccionó a dedo a esta empresa y que negociaron las canastas con sobreprecio.
Al menos hasta febrero de este año, la deuda de Educación con NSB era de $942,205.60 y las facturas estaban pendientes desde el 1 de septiembre del año pasado, según el informe.
Revista Factum preguntó a Bendeck, a través de un correo electrónico, si el MINED había pagado la deuda de casi un millón de dólares que tenía desde el 1 de septiembre del año pasado, a lo cual respondió: “hemos recibido abonos a esa deuda”, sin aclarar los montos que le abonaron. Se le preguntó además si la empresa sigue siendo proveedora de azúcar y bebidas fortificadas u otro tipo de productos alimenticios y contestó: “participamos en los diferentes procesos de compra que realiza ese ministerio a través de BOLPROS y Comprasal”.
Se solicitó una llamada con Bendeck para obtener más detalles, pero únicamente respondió por escrito que “en ningún momento el gobierno ha caído en impago con nosotros. No hemos dejado de proveer en ninguno de los contratos que tenemos con MINED por ‘falta de pago’ o ‘impago’”.
El refrigerio escolar consiste en la entrega de arroz, frijol, aceite, azúcar, biofortik (bebida a base de maíz fortificado y sorgo RCV o maicillo), leche y cereal en 5,107 centros educativos por un promedio de 120 días a lo largo del año, de acuerdo al sitio del Ministerio de Educación.
Sindicatos de profesores han denunciado la falta de leche y frijoles, y que otros productos como el azúcar y el biofortik son insuficientes para el refrigerio de los estudiantes de la mayoría de escuelas.
El secretario general del Sindicato de Maestros y Maestras de la Educación Pública de El Salvador (SIMEDUCO), José Rodríguez, dijo a Revista Factum que aplaude que el gobierno le dé un plato de comida diario a los alumnos, pero que debieron gestionar con anticipación porque cumplir con el programa “ayuda a mejorar la atención y el rendimiento en las clases”.
Según el presupuesto del MINED, destinaron $22 millones a la línea de Atención a la Salud y Nutrición Escolar, para suministrar de alimentos los centros escolares públicos, “así mismo, garantizar como mínimo el consumo de dos vasos de leche fluida por semana, producida nacionalmente, como complemento al refrigerio escolar”.
Pero al menos hasta febrero de este año, no se logró concretar la compra de leche líquida UHT, a pesar de las gestiones realizadas con el Ministerio de Agricultura (MAG), según el informe, porque “no se ha asegurado el abastecimiento de la materia prima”. El documento detalla que la cantidad de botellas diarias de leche requeridas es de 35 mil, pero que, “según información proporcionada por la Dirección de Ganadería del MAG, el promedio puede ser de 15 mil a 20 mil botellas diarias, máximo”, por lo que la entrega sufriría retrasos.
Con respecto a la falta de frijoles en el refrigerio en las escuelas, el ministro de Educación interino, José Mauricio Pineda, dijo el pasado 29 de marzo, en una entrevista en Canal 21, que “no hay frijol en el país. Entonces estamos viendo cómo solventamos eso (…) estamos haciendo esfuerzos para poder traer el frijol de fuera del país para poder solventar este déficit que en este momento estamos experimentando”.
Según el informe, la verdadera razón fue “debido a que después de varias ruedas de negociación realizadas en octubre del año pasado, y ajustes de precios, no se logró concretar contratos” para adquirir frijol rojo, por lo que reorientaron los fondos para equipamiento de cocinas en centros escolares.
En el documento se menciona que no fue posible para la primera entrega, por lo que por lo que solamente 1,615 centros educativos de Ahuachapán, Sonsonate, Chalatenango, Morazán y Cabañas “recibirán el producto, dejando desabastecidos los otros 9 departamentos” restantes del país.
El pasado 3 de mayo, una profesor de una escuela dijo a Revista Factum que el ministerio envió una calendarización para la entrega de frijol rojo en el país. Según este documento, entregarían el producto a partir del 5 de mayo.
El informe también detalla que la bebida biofortik solamente se lograría cubrir con los niveles de inicial y parvularia de 4,548 centros educativos y los 15 Centros de Desarrollo Infantil “debido al desabastecimiento de materias primas (maíz y sorgo), que se tuvo en el marco del convenio con el Programa Mundial de Alimentos“.
Pero las deudas, el desabastecimiento y falta de acuerdos no fue el único obstáculo que enfrentó el Ministerio de Educación. Hasta el 10 de febrero de este año, la coordinadora del Consejo de Administración del Fondo Especial de los Recursos Provenientes de la Privatización de Antel (Fantel), Claudia Juana Rodríguez de Guevara, no había aprobado el proyecto “Refrigerio Escolar para estudiantes de los centros educativos oficiales de los departamentos de Morazán, Chalatenango, Ahuachapán, Sonsonate y Cabañas 2023-2025”, por un monto de $10,056,216.60.
El ministerio envió a Rodríguez la primera carta el 31 de octubre de 2022; la segunda, el 18 de enero de este año y la tercera, el 10 de febrero, además de “correos enviados en reiteradas ocasiones a la coordinadora del Comité Consultivo FANTEL”.
Rodríguez es una funcionaria de alta confianza de la administración de Bukele, tanto que ostentó varios cargos de la administración pública desde que él asumió como alcalde en la alcaldía de Nuevo Cuscatlán, cuando fue gerente financiero, según el portal de transparencia. En su hoja de vida detalló que fue tesorera municipal de la alcaldía de San Salvador y gerente financiera de la Presidencia.
Actualmente, además de ser coordinadora de Fantel, es secretaria privada de la Presidencia, directora propietario representante del Ministerio de Relaciones Exteriores y también está a la cabeza de la Dirección Nacional de Obras Municipales (DOM).
Esta revista llamó a los números de teléfono institucionales de la funcionaria Rodríguez de Guevara para consultar si finalmente había aprobado el proyecto, pero no hubo respuesta. También se enviaron preguntas al correo electrónico institucional info@obrasmunicipales.gob.sv.
La propuesta para la compra de frijoles y leche líquida, de acuerdo al documento, fue realizar gestiones de alto nivel con el Ministerio de Hacienda, “para lograr saldar las deudas por lo menos de manera parcial, ya que hay un desinterés general por parte de los proveedores en seguir participando en los procesos de compra”.
También propusieron que, debido a la dificultad para obtener la leche de origen nacional, no se limitara la compra y que se modificara el requerimiento para que solo una porcentaje sea nacional.
Con respecto al frijol rojo, se planteó que el 2 de marzo habría una reunión con proveedores de frijol recién contratados para ver la posibilidad de adelantar la entrega del producto.
Revista Factum llamó a la encargada de comunicaciones del MINED para gestionar una entrevista con el ministro de educación, y consultó por qué la empresa NBS, investigada por la Fiscalía, aparecía entre los contratistas del programa de alimentos, si ya habían logrado pagar todas sus deudas y la aprobación del proyecto por parte de Rodríguez de Guevara. La encargada dijo que gestionaría la entrevista. Esta revista volvió a llamar el 9 y también el 11 de mayo, y respondió que volvería a hacer la gestión. Al cierre de esta nota, no llegó esa respuesta.
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