Ni Obras Públicas ni Fovial responden por la ciclovía fallida de San Salvador

El ministerio y la autónoma se tiran la pelota en cuanto a la información general del proyecto en las colonias Escalón y San Benito: la empresa que contrataron para redistribuir las calles y el dinero gastado. Ninguno da razón sobre los fondos invertidos en el tramo de la ciclovía en la avenida Los Almendros, que cruzaba la calle La Mascota y que fue deshecha apenas mes y medio después de que se construyó.

Foto Factum/Gerson Nájera


El Ministerio de Obras Públicas (MOP) y el Fondo de Conservación Fovial (Fovial) aseguran que no tienen información sobre las ciclovías que el gobierno montó sobre las colonias Escalón y San Benito, en San Salvador, y que son parte de un proyecto de redistribución de calles importantes para el tránsito vehicular en el área metropolitana. El MOP dice que el Fovial tiene la información y el Fovial, viceversa, dice que el MOP la tiene. 

Dos solicitudes de acceso a la información pública enviadas el mismo día a ambas instituciones, y que tuvieron respuesta simultánea hasta dos semanas después, concluyen en que ninguna institución sabe sobre el contrato para el montaje de las ciclovías de las colonias Escalón y San Benito, ninguna sabe la empresa a la que le fue adjudicada esa fase del proyecto, de 2 millones de dólares (según la misma propaganda del gobierno), y ninguna sabe cuánto se ha gastado al momento por cada tramo.

El 13 de junio de 2022, el MOP y el Fovial lanzaron un proyecto de redistribución de calles y construcción de vías para ciclistas, llamado “Plan Maestro de Ciclovías para el Área Metropolitana de San Salvador”. Anunciaron que estaría dividido en fases y que tendría un costo de más de 10 millones de dólares. La fase 1 incluyó la construcción de la ciclovía en el bulevar del Hipódromo, en la colonia San Benito, así como en calles aledañas, como la avenida Los Almendros, que cruza por la calle La Mascota. 

El 18 de mayo, casi un mes antes, el MOP y el Fovial ya habían inaugurado la ciclovía en el bulevar del Hipódromo, en la colonia San Benito, y anunciaron la construcción del tramo en la avenida Los Almendros. Y así fue: para el 2 de julio, los separadores ya estaban puestos y los trabajadores solo retocaban la pintura en el tramo de Los Almendros.  

Un mes y veinte días después, el 22 de agosto, el gobierno tuvo que dar marcha atrás al tramo de Los Almendros. Los trabajadores regresaron a retirar los separadores de cemento que apartaban la vía para los ciclistas. El retroceso se debió a reclamos de habitantes, comercios y padres de familia de centros educativos de ese sector que se quejaron por el intenso tráfico que provocó esa construcción.

Sobre la avenida El Almendro, que conecta la Calle La Mascota con el Bulevar del Hipódromo, aún se evidencia el tramo de ciclovía, pintado de color azul, que el Ministerio de Obras Públicas se vio obligado a eliminar debido al embotellamiento que provocó. Foto Factum/Gerson Nájera

El MOP y el Fovial ahora no quieren informar cuánto dinero público se destinó para construir ese tramo de ciclovía ni cuánto costó retirarlo y volverlo a hacer vía de tránsito vehicular. A la fecha, lo que queda del tramo fallido de la ciclovía en Los Almendros son rótulos que avisan que por allí pasan ciclistas, aunque no haya espacios para ellos.

En sus respuestas a las solicitudes de acceso a la información pública que se hicieron el pasado 10 de enero, el MOP se basó en la consulta a tres direcciones de ese ministerio: la Dirección de Infraestructura Inclusiva y Social (DIIS), la Dirección de Construcción y Mantenimiento de la Obra Pública (DCMOP) y la Gerencia de Adquisiciones y Contrataciones Institucional (GACI). Esta última, la GACI, respondió que no tiene en sus registros ningún proceso de contratación sobre ciclovías. La DCMOP dijo que no existe ningún proyecto en sus registros sobre ciclovías. Y la DIIS aseguró que los montos de inversión correspondientes a las ciclovías emergentes “se encuentran en manos del Fovial”. 

Una vendedora ambulante hace uso de la ciclovía ubicada sobre el Bulevar del Hipódromo, debido a que los vehículos estacionados en la acera obstruyen el paso peatonal. Foto Factum/Gerson Nájera

Y el Fovial, por su parte, contestó que la información referente a las ciclovías en el área metropolitana de San Salvador debe ser solicitada al MOP, porque el ministerio la posee.  Aunque indicó que los montos de inversión están publicados en su página de transparencia. Pero en esa página, transparencia.gob.sv, no existe ningún registro relacionado con ciclovías. Tampoco en el sitio de Comprasal es posible acceder al contrato con la empresa a la que se le adjudicó el proyecto.

La falta de información pública por parte del gobierno sobre estas construcciones se añade al conflicto de opiniones por las ciclovías. El parque vehicular de El Salvador a enero de 2023 es de 1.6 millones, según una encuesta reciente de la Universidad Francisco Gavidia. Y solo en un año, entre los meses de enero de 2022 y 2023, un total de 127,293 vehículos se sumaron al tráfico de las calles salvadoreñas.   

Ciclovía sobre el Bulevar del Hipódromo y parqueos sobre zonas peatonales. Foto Factum/Gerson Nájera

La primera construcción del llamado plan maestro de ciclovías, la de la colonia San Benito, ha recibido críticas. La calle del bulevar del Hipódromo, que en algunos tramos tenía hasta seis carriles, tres en cada dirección, ha pasado a ser una división de dos carriles para ciclistas, dos carriles para estacionamientos y solo dos carriles, en direcciones contrarias, para el tránsito de vehículos. El tráfico, aseguran conductores que han sido consultados, se ha vuelto más complicado en la zona, y las áreas de circulación para los ciclistas, a su parecer, no pasan pobladas por personas en bicicleta como se esperaba.

Pero las quejas de conductores y habitantes de los lugares por donde pasan las ciclovías no son compartidas por ciclistas, como Diego Barrios, representante de Bicimanía. Por el contrario, Barrios cree que las ciclovías son necesarias y en este punto, para él, el gobierno está adelantado frente a los de otros países de Centroamérica.

“No hay mejor decisión que hacer ciclovías. La saturación de carros es demasiada. Pero en esto el conductor no está de acuerdo con el ciclista y el ciclista no está de acuerdo con el conductor, y los motociclistas no están de acuerdo tampoco, y así se pasan peleando”, dijo Barrios.

Ciclovía sobre el Bulevar del Hipódromo en San Salvador. Foto Factum/Gerson Nájera

El gobierno, pese a su falta de transparencia con los fondos públicos, no se detiene con las ciclovías. La propaganda del MOP y del Fovial asegura que la fase 1, donde se encuentra la San Benito, incluye la construcción de una ciclovía en la colonia Escalón en dos tramos. El primero, en la 87 y 89 avenida sur, en las calles Padres Aguilar y El Mirador; y el segundo, en la 75 avenida norte y 9 calle poniente. La fase 1 se completa con una vía para ciclistas en las calles de Ciudad Merliot, en Santa Tecla. El costo de la primera fase, según la publicidad de junio del año pasado, es de aproximadamente 2 millones de dólares.

El proyecto, sin embargo, es más ambicioso. Hay una segunda fase que incluye la Ciudad Universitaria, el Centro de Gobierno y San Jacinto, para lo que se han destinado alrededor de 2.4 millones y cuya construcción se tiene programado que finalice este año, según lo dicho por el MOP y el Fovial en junio de 2022.

El Bulevar del Hipódromo contaba tres carriles en ambas direcciones. Con el plan maestro de las ciclovías dedicaron uno exclusivo para bicicletas, uno para parqueos y uno para circulación.Foto Factum/Gerson Nájera

En diciembre pasado, el Fovial le adjudicó a la empresa CAP el proyecto de adecuación de rampas y aceras para la construcción de ciclovías en el área metropolitana de San Salvador, por un monto de casi medio millón de dólares. Por lo que el proyecto gubernamental de construir más ciclovías, al menos en contratos, continúa.

 

 

 

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