Los “Panama Papers” y las élites latinoamericanas

Los “Panama Papers” han revelado supuestas cuentas secretas y estrategias de evasión de impuestos de varios líderes latinoamericanos, pero las preexistentes percepciones generalizadas de que las élites políticas y económicas son corruptas podrían reducir el valor del impacto inmediato de las revelaciones.


Más de 11 millones de documentos filtrados desde el bufete panameño de abogados Mossack Fonseca —dada una revisión inicial hecha por el Süddeutsche Zeitung y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés)— proporcionan evidencia de 215,000 acuerdos mediante los cuales 14,153 clientes poderosos y adinerados de todo el mundo ocultaron su dinero del fisgoneo de medios de comunicación, recaudadores de impuestos y expertos en responsabilidad pública. Los primeros informes indican ya que latinoamericanos —pequeños infractores en comparación a los rusos y algunos europeos— se encuentran entre los mencionados.

  • El escándalo Petrobras que ha paralizado a Brasil encontrará aún más combustible en estos archivos. Los investigadores de la operación “Car-wash” aparentemente no tenían conocimiento de muchas cuentas a nombre de funcionarios de Petrobras. Una empresa secreta vinculada al Presidente de la Cámara, Eduardo Cunha, quien encabeza la carga en los esfuerzos para acusar al Presidente Rousseff, según los informes, destaca en el escenario.
  • El presidente argentino Mauricio Macri, su padre y su hermano, al parecer tuvieron una empresa offshore durante 10 años. La cerraron en 2009, dos años dentro del periodo de Macri como alcalde de Buenos Aires, pero éste no informó nada sobre ello. El gobierno dice que él era sólo “circunstancialmente” el CEO.
  • El presidente de la sede chilena de Transparencia Internacional, Gonzalo Delaveau, renunció por estar vinculado a por lo menos cinco empresas offshore.
  • La asociación del presidente de México Enrique Peña Nieto con el magnate contratista Juan Armando Hinojosa es, una vez más, una deuda. Hinojosa tenía, al parecer, una enorme variedad de viviendas por valor de US$100 millones. El presidente fue arrastrado por el barro —y eventualmente exonerado de implicación personal— a través de una mansión que supuestamente Hinojosa dio a su esposa. El gobierno mexicano está investigando varias docenas de otros nombrados en los documentos.
  • Muchos otros casos se encuentran a la espera. Pedro Delgado (ex gobernador del Banco Central del Ecuador y primo del presidente Correa); financiadores de la candidata presidencial peruana Keiko Fujimori; y una serie de ex funcionarios de bancos centrales y oficiales de inteligencia —peruanos, venezolanos, panameños y otros— están todos siendo examinados. En El Salvador, el Fiscal General, ya criticado por su celo investigativo, ha allanado las oficinas de Mossack Fonseca, lo que sugiere más revelaciones por venir.

Las acusaciones de evasión de impuestos, ingresos ocultos y otras formas de corrupción son uno de los pilares de la vida política de América Latina —y las revelaciones de Panamá no hacen sino agravar la opinión tan frecuente de que la gente rica y poderosa juega con sus propias reglas para mantener la riqueza y el poder. Ramón Fonseca, uno de los fundadores de la firma de abogados, afirma que la publicidad es parte de “una campaña internacional contra la privacidad”, que calificó como “un derecho humano sagrado [y] hay gente en el mundo que no entiende eso”.

La reacción en contra de alguien como el presidente argentino Macri puede no ser demasiado grande, sobre todo porque su familia salió de los paraísos fiscales hace años. Pero lo que hace potencialmente perjudiciales a estas acusaciones es el número de personas implicadas —tanto en sectores públicos como privados— en muchos países, dentro de una investigación que sólo acaba de comenzar. Es seguro que otras revelaciones aún están por venir, y aunque éstas sí son un signo de transparencia, desafían la fe de la gente en que los líderes vayan a descubrirse. Las revelaciones alimentarán el cinismo popular y el descontento a corto plazo, pero renovadas demandas de transparencia podrían eventualmente ayudar a reavivar la confianza popular en el gobierno.

* Emma Fawcett es estudiante de doctorado en Relaciones Internacionales en la American University. Su tesis doctoral se centra en la economía política de turismo y  desarrollo en cuatro estudios de caso del Caribe: Haití, República Dominicana, Cuba y el Caribe Mexicano. Fulton Armstrong es investigador asociado al Centro de Estudios Latinoamericanos de American University, en cuyo blog apareció la versión original de este artículo en inglés. La traducción es de Alejandra Nolasco.

 

Foto principal: Ciudad de Panamá, tomada de Flickr con licencia Creative Commons.

¿TE HA GUSTADO EL ARTÍCULO?

Suscríbete al boletín y recibe cada semana los contenidos en tu email.