José Roberto Marín López, concejal de Arcatao en 2012 y 2015

"El día de las elecciones hubo una coalición contra un único enemigo: el FMLN"

José Roberto Marín López fue concejal de Arcatao entre los años 2012 y 2015. Miembro activo del FMLN, Marín estuvo presente el pasado 28 de febrero en uno de los centros de votación del municipio de Chalatenango. Afirma que lo que ahí ocurrió no fue transparente, pues, a su juicio, todos los partidos políticos se unieron para vencer, a través de Nuevas Ideas, al FMLN. 

¿Qué fue lo que sucedió el 28 de febrero, en las elecciones de aquí en Arcatao?

Mire, lo que he podido rescatar de la información que he tenido –mientras he podido trabajar en esto– es que a esta elección no la vi que fuera lo más transparente. Hablo del proceso. Y, como le digo, en varias cosas, porque en este municipio lo que no vi como legal fue haberse entregado las instalaciones del centro de votación de aquí del cantón y también la que estuvo en el casco municipal. Allá, tuvimos información, con fotos y videos, de que el jueves por la noche estaban entrando carros de gobierno. Si las instalaciones ya estaban entregadas al Tribunal (Supremo Electoral), no debían entrar otros carros. 

Lo otro fue que el director del Centro de Votación, como es el director del Instituto… aunque ya haya entregado la llave original, también tenía llaves de copia. Él tuvo el acceso de entrar después de haber entregado con su copia de llave. Entonces, eso no es normal. Aunque sea el director o quien sea, si la entregó, la entregó, vaya. No tenía que tener nada de acceso al Centro de Votación. Y aquí en la zona de nosotros lo que no vi transparente fue que… como le dije, tuve la oportunidad de trabajar de vigilante y había eso: que todos contra uno. Eso sí se dio. Todos los demás… en una gran coalición que se hizo. Y eso no lo vi normal. Aquí ha habido la presencia de Arena, que siempre ha sido muy fuerte. Si ha habido otro candidato, es del PCN. Y ese día fue todos contra uno. Lograron contar con más credenciales de otros partidos que ni siquiera compitieron aquí, como el CD o GANA, que no llevaban candidato aquí. Y tenían las credenciales solo para hacer el volumen de personas con credencial para que todos estos fueran en contra de uno. Aquí el único de izquierda es el FMLN. Todos contra uno. Entonces, eso no lo vi bien. Dicen que tuvieron la oportunidad de sacar a dos muchachas de arriba. Una, por cierto, es la sobrina –o no sé si es la nieta– de María Chichilco, que es hija de la profesora Morena; y la mujer del candidato, Milton Monge. Que a ella la sacaron porque no debía estar, porque es la mujer de él. Pero ellas vinieron con chalecos de Arena aquí, a servir de vigilantes en el Centro de Votación donde estaban. Y eso no es normal. Pero como todos contra uno, yo, solamente como propietario, no podía hacer nada contra todos. Había credenciales como de seis partidos, digamos; y todo era en coalición contra un único enemigo, que era el FMLN. Entonces, llegamos a un acuerdo, al inicio, con los de la mesa, que no podía venir otro de afuera –ni acompañado ni nada–, ni los vigilantes a prestarse para decirle a la gente «Yo le puedo ayudar». Pero el primero que lo rompió y se prestó a ello fue el de Nuevas Ideas, que dijo: «Si quiere, yo le ayudo». Y eso no se puede. Eso lo acordamos desde el principio: si una persona necesitaba ayuda, era el último vocal quien lo podía hacer. Pero ese acuerdo ellos lo rompieron. Entonces pasó todo ese proceso. A la hora del conteo, algo que ya estaba bien planeado, un supervisor se levantó de la mesa y dejó a su yerno de presidente de la mesa, que era de Arena. Ahí había tanta gente que se le acumuló. Sin duda, estaba pagado por Arena, pero como Arena era parte del todos contra uno, era la misma cosa, entonces. Como le digo, yo tenía la caja que tenía todas las papeletas en el conteo de votos. Y entonces se apagó la luz… Pero él fue el que lo provocó. Apagó la luz. Y nosotros, por ver lo que pasaba, ya nos descuidamos. Usted sabe que en el término de un segundo, cuando hay un plan trabajado, se puede esconder una hoja o algo. No sé. Pero eso te deja que no es normal, tampoco. No sé, pero esta ocasión no fue la más transparente. Aunque uno quisiera trabajar, porque a uno le gusta que las cosas se hagan bien, ¿verdad? Pero se vio que esta votación no fue la más transparente. 

Lo otro negativo que se dio fue que se le prohibió el paso a los los salvadoreños de todos los caseríos de ahí, del otro lado, en Honduras. Son gente salvadoreña, por fallo de La Haya, aunque hayan quedado del otro lado. Eso fue todo un trabajo del Gobierno, digamos, una orden del gabinete: que se cerrara [la frontera] hasta el último día. Todavía a las seis de la tarde no había ningún permiso. Se llegó las seis de la mañana y no había ningún permiso para que pasara la gente. Y nosotros, como en esa parte respetamos, no pudimos hacer nada. El último comunicado lo hizo el candidato de Nuevas Ideas, que dijo que todo estaba arreglado. Pero solo a la gente de Nuevas Ideas que tenían ya conocida que podían votar por ellos movieron para este lado. Cuando se cerró todo, tuve la oportunidad de revisar el padrón de los manchados y voy viendo claramente que los únicos que vinieron a votar fueron los de Nuevas Ideas, los que han trabajado por ellos. Los nuestros no pudieron pasar. Una familia Gómez, la familia Ortega… que son un grupo que podía apoyar al FMLN… esa gente tuvo miedo.

Don Roberto, ¿cuál cree que fue la razón principal por la que el FMLN perdió las elecciones en Arcatao?

Por la coalición qué hubo. Cómo le digo, eso nos afectó. Y, como le digo, que no nos dejaron que moviéramos a la gente de nosotros. Estamos hablando de, por lo menos, no de cantidades grandes… pero unas 40 personas del otro lado que no se movieron.


  • Esta entrevista se realizó el sábado 12 de marzo.